Mi tatuaje

Una frivolidad no le hace mal a nadie y bueno... qué puedo decir: estoy FELIZ con mi tatuaje. Me lo hice hace aprox. un mes y medio. A la vejez viruela pensarán...jaja!! Bueno, les diré por qué.

Hace muchos años quería hacérmelo pero el miedo a las agujas me lo impedían, sólo de pensar en el ruidito de la maquinita, que es muy parecido a la de los dentistas, se me laciaban todos los rulos de la cabeza.

Luego de algunas circunstancias de la vida por las que tuve que pasar, los pinchazos se hicieron tan comunes que decidí darle cara a esta circunstancia y enfrentar mis miedos...luego de mucho esfuerzo, finalmente lo logré y me dí cuenta que ya no sudaba, ni me ponía más tensa que cuerda de guitarra cuando veía una jeringa. Problema resuelto...¿siguiente paso? corrí cual correcaminos a hacerme mi tatuaje...no tuve que pensarlo nada, siempre supe qué quería y por qué lo quería.

Bueno, aquí está...les presento a mi tatuaje.