Cine- Literatura- Música- Fotografía- Viajes- Reflexiones- Budismo- Reiki- Filosofía Oriental- Yoga y más...


24 de octubre de 2007

Con mi casa a cuestas

Un pequeño cangrejo ermitaño, que anda sólo con lo que necesita: un refugio.
Deberíamos de aprender de la naturaleza. Los humanos nos atiborramos cada vez más de cosas innecesarias con la excusa que son recuerdos o que nos pueden servir en algún momento, y lo que hacemos es complicarnos buscando un lugar cada vez más grande donde vivir para poder guardar toda esta ruma de bienes (¿o deberían llamarse males?) materiales, sin darnos cuenta que tener un techo para refugiarnos, un poco de comida para alimentarnos y algo de ropa para abrigarnos es lo que necesitamos para vivir... cada día nos volvemos más dependientes de las cosas (el celular, el internet, la TV, el auto, etc) y nos alejamos de nuestra esencia primordial, de nuestra relación pura y desinteresada con la madre naturaleza. Deberíamos sentarnos un rato a meditar sobre lo que está sucediendo en nuestro mundo y las consecuencias terribles que nuestro comportamiento está ocasionando: la contaminación, el uso excesivo de energía, las toneladas de basura que creamos, etc.
Tal vez algún día, y espero sea pronto, porque tiempo es lo que menos tenemos, pongamos nuestro granito de arena y recuperemos la unión simple y pura que teníamos con el cosmos.
Soñar no cuesta nada; y los sueños muchas veces se hacen realidad!!!!!



1 comentario:

Anónimo dijo...

El cangrejito está bien gracioso y se le ve tan vulnerable. Me gustaría saber qué vas a hacer tú para empezar a alejarte de tanta dependencia material (las vacaciones que lo alejan a uno del estrés no valen, aunque la meditación supongo que sí, pero es insuficiente). Yo, por ejemplo, no uso celular y no tengo auto. Por algo se comienza.